Momentos Chanantes: Las fiestas de tu pueblo.

¿Qué tal andamos panda de raspalatas? ¿Bien? ¿Mal? ¿De exámenes? En cualquier caso, con tiempo de sobra,si no no andarías por aquí gastando ese preciado tiempo que normalmente dedicas al onanismo o, en su defecto al visionado de eso que tu llamas arte en el rellano, yonkis, o sólo Caín sabe que otra página.
Hoy os traemos un post de esos chanantes, uno que no se olvida... eso a lo que todos recurrimos como último recurso para intentar que nuestros allegados (que no amigos) crean que tenemos vida social y, si la imaginación da, hasta parienta: las ferias de tu pueblo.
Lo primero y más importante de todo, es ponernos en situación. El pueblo es ese locus amoenus, ese jardín del edén que todos tenemos en la cabeza, o en su defecto, el lugar de nacimiento de papi, mami, o amigos. La típica feria del pueblo es facilmente descriptible si observamos sus factores uno a uno.

Dentro lista!:

Las atracciones:

Un punto a favor de la feria de tu pueblo es que las atracciones, que los famosos "cacharritos" no valen más de 2 pavos y medio (pavo como euro, porque si aun va la cosa con trueque estás jodido). ¿Puntos en contra? Que eres un jodido viejo, ya no tienes edad para montarte con los niños en el gusano loco Michael Jackson, además el culo del friky medio no entra en esas malditas y estrechas atracciones. Os lo decimos nosotros.

Los feriantes:

Si, si y tres veces sí. Nos referimos a esa raza de superhombres, listos como ratas, encogiodos como catalanes (visca el barça, tú). Usarán todas las armas en su arsenal para sacarte los cuartos sin casi darte cuenta: Cánticos a la minimoto, evocaciones de Bob Esponja, doblar cañones de escopetas de perdigones,pegar muñecos a maderas para que no sean derribados con esa maldita bola de peluche, reducir el tiempo de paseo del canguro o escupir en la masa de los churros. ¡Qué listos los jodios!

Los canis:

Este no, becario...

¡Éste si coño!

Toda feria de pueblo que se precia cuenta con un buen puñado de estos mamanabos. Camisas de tirantes ajustadas (to´petao shu primo), oracos, un pendiente con forma de pluma, oracos, gorrilla con alerón aerodinámico último modelo, oracos y sí señor, más oracos (¡MISTER T MUÉRETE DE ENVIDIA!). Coche tuneao a lo "Fast and the Furious" pero sin tías buenorras, sino con chonis a las que la raya del ojo les da la vuelta a la cabeza. Neones,maleteros abiertos, botellón, música estridente compuesta en su totalidad por pitidos y zumbidos y estos notas
tienen la fiesta montada. ¡A liarla coño!

Los borrachos:

Pero no cualquier borracho. Aquí deberíamos situar al borracho perenne del pueblo. Al Barney Gambel de turno. A ese tío asqueroso que tiene 40 o 45 tacos y sigue viviendo con mami(pero de una manera que nada tiene que ver con la tuya, friki medio). Al que se ducha todos los meses, toque o no toque (a veces le sale el agua sin enturbiar y todo). Todos tenemos a uno de esos en nuestros pueblos... tienen hasta chistes propios en la mayoría de lugares, auténticos ídolos de masas por su aguante y su hígado de acero (tal vez se deba a que tienen un par). No puede faltar nuestro borracho en las ferias de su pueblo, por amor a Satán, liándola parda, dándolo todo y en el peor de los casos hasta demostrando que además de un aguerrido bebedor es un pésimo bailarín el patán.

Y por ultimo, y por ello, seguramente, mucho más importante, la orquesta:



Esa suerte de pseudomúsicos, músicos fracasados y extunos que se dedican a versionar (plagios descarados sin pagar un puto duro a la SGAE, ¡con dos cojones!) canciones de relativo éxito. Bombos, tambores, cajas, trompeta por aquí, trompa por allá... solo falta la cabra (normalmente porque intento emular a superman desde algún campanario), con la que acostumbráis a acabar decepcionados esperando escuchar la marcha imperial y teniendo que conformaros con alguien llamado Paquito que se dedica a la fabricación de chocolates... es con ellos cuando el señor del apartado anterior cobra máximo protagonismo.

Recuerda correr si ves todo esto junto... o, si eres fuerte de corazón, agárrate a una botella de vino, aíslate de tu alrededor tal y como haces en tu día a día e intenta disfrutar del momento.

Bueno ya tenéis todos los datos para distinguir si estáis en un circo de freak show o en la feria de vuestro pueblo (que normalmete se distingue porque en lo primero tu estarías en las jaulas) y con ésto y un bizcocho, que os den un rato.